domingo, 31 de octubre de 2010

(Algo más que) Una recomendación: Mittens y Wild Honey


Retomamos un clasicazo de este blog, las recomendaciones, y lo hacemos con dos bandas de las que llevaba mucho tiempo queriendo hablar en Rainy Day Music: Mittens y Wild Honey. Conocí a Mittens por medio del fotolog de uno de sus componentes, vueltas que da la vida; de repente caí en la cuenta de que uno de esos fotologueros que visitaba con cierta asiduidad tenía una banda, esa banda acababa de editar un LP y yo, como buen curioso que soy, me dispuse a escucharlo; a la media hora ya estaba encargando el disco. Me gustan mucho Mittens porque considero que son una banda con estilo, con mucha clase, y ejecutar un pop tan anclado a la tradición aglosajona habiendo nacido en la Piel de Toro, y hacerlo además con la solvencia con que lo hacen estos madrileños, es de matrícula de honor. Los chicos de Mittens han sabido ser pacientes, algo poco usual en el mundo de la música, un negocio lleno de urgencias donde todo el mundo está dispuesto a editar su primer disco cuanto antes y al precio que sea, el quinteto madrileño en cambio ha ido experimentando en forma de EP's; la manera idónea de construir un sonido propio, una personalidad sin fisuras. De este modo, tras sus dos primeras referencias, los citados EP's, "Fix of Sun" (2007) y "Mingering Mike" (2008), deciden en este 2010 vestirse de gala y regalarnos una magnífica colección de canciones, su disco de debut, que se ha convertido en uno de los mejores trabajos del año, y no me refiero únicamente al mercado español. "Deer Park Mirage" es el título del primer LP de Mittens, y es el resultado de años de trabajo, de colaboraciones, de multitud de influencias que saben complementarse perfectamente y que se muestran totalmente permeables para formar así parte de un todo que exhala personalidad y honestidad por todos sus poros. Mittens no eran unos desconocidos antes del lanzamiento de su primer disco, por lo que tuvieron ofertas por parte de varias discográficas para poner en el mercado su debut, pero finalmente, haciendo gala de una integridad moral y de una sensatez poco habitual en el negocio, deciden autoeditarse, aprovechando el sello que crearon para el lanzamiento de su primer EP, Lazy Recordings. Pero no sólo eso, los muchachos de Mittens, lejos de ignorar la realidad discográfica y el papel que las nuevas tecnologías desempeñan en la actualidad, deciden colgar el disco en la red, desde donde te puedes descargar toda su discografía. No sé qué pensará la señora Ministra de Cultura, y sí, me puedo imaginar lo que pensarán los integrantes de la Santa Inquisición, pero esto funciona, y cada vez más y mejor, de hecho yo me he comprado el disco, y espero que mucha más gente lo haga, sólo así se puede premiar a quienes de verdad difunden cultura y demuestran ser honestos.

Pero, derechos de autor al margen, vamos a centrarnos en la banda y en su debut. Mittens son Anita Steinberg, voz y guitarra acústica, Javichu, encargado de la percusión, Jose, guitarrista, Javi, guitarras, teclado y melódica, y finalmente, Guillermo, a los mandos del bajo y secundando a Anita a las voces. ¿A qué suena el primer LP de Mittens? pues a gloria bendita, a esas bandas de pop cristalino y melancólico que tanto nos gustan, a aquellos grupos que saben cantarle al lado más emotivo de la vida sin caer en sobados manierismos ni en ñoñerías propias de una mente preescolar; Mittens suena a POP, así con mayúsculas, pop brillantemente ejecutado. Es inevitable encontrar referentes en el sonido de Mittens, obviamente toda formación los tiene, de hecho me parece algo lógico y coherente en un mundo, como el musical, en el que la originalidad está sobrevalorada y mal entendida. El pop de los 60's está muy presente en la propuesta musical de Mittens, pero también lo están grandes bandas de los 90's como BMX Bandits (grandes, sigo reivindicándolos) o The Ladybug Transistor, e incluso los ecos del country más melancólico e íntimo; todo ello, fruto de las diversas influencias y apetencias de los integrantes de la banda, contribuye a crear un mosaico sonoro con múltiples matices, en el que las teselas están perfectamente integradas, sin dejar una sola grieta por la que pueda entrar ni el más mínimo ápice de mediocridad. Sean cuales fueren las influencias de la banda, cuestión que no vamos a intentar adivinar, lo que está claro es que demuestran tener un gusto infinito. "Deer Park Mirage" da la sensación de haber sido cocinado a fuego lento, como se hacen lo grandes guisos, ya desde el inicio, con esa diminuta joya que es "Marblehead", uno tiene la sensación de estar penetrando en algo muy íntimo y muy mimado. Pero cuando llega el segundo corte del disco, aquel que da nombre al LP, ya tomamos conciencia de estar ante algo grande de verdad; no me sonrojo si afirmo que "Deer Park Mirage" es una de las mejores canciones que ha dado el pop en nuestro país y, de largo, mi candidata principal a ser el tema del año. "Deer Park Mirage" es una obra de arte, una canción perfectamente medida, con unas voces y unos arreglos maravillosos, que no se pierde en desarrollos superfluos, que proporciona al oyente aquello que precisamente anda buscando, si es que éste anda detrás de la canción pop perfecta. El disco podría terminar aquí, en el segundo tema, y a mí me parecería fantástico, pero es que continúa con otra joyita, "I Shot The Skier", un tema inspirado en la rocambolesca historia de Claudine Longet (otra de mis debilidades, si queréis recordar más, pinchad AQUÍ). Me encantan las guitarras de "I Shot The Skier", pero es que además creo que es el tema en el que mejor suena la voz de Anita, limpia y seductora; es un tema que me recuerda algún pasaje de Zumpano (otro vicio confesable), aunque obviamente es sólo una apreciación personal. El festín continúa con "Jaffa Cakes", que abre con unas palmas muy adictivas, reconozco que soy un estómago agradecido, unas palmas, unos silbidos y unos buenos coros y a mí ya se me han ganado. En "Wrecage and Dust" es donde más me recuerdan a los primeros Belle & Sebastian, aquellos que construyeron monumentos como "If You're Feeling Sinister", disco de cabecera de quien aporrea estas teclas, aunque también se acercan a las armonías vocales de alguna que otra banda escandinava, de ésas que saben interpretar perfectamente el concepto de pop cristalino de raíces sesenteras. "Our Last Party" es otro tema que me gusta especialmente, personalmente me parece una acertada aproximación a los sonidos country en clave de pop, de nuevo con una Anita muy inspirada y con unos teclados que engalanan perfectamente otra canción redonda de Mittens.

La cara B del LP se abre con "Toxic Black Mold", un tema que exhibe, de nuevo, un maravilloso trabajo de guitarras y que demuestra que las voces de Anita y Guillermo se entienden perfectamente en un estribillo precioso. "Swimmers" me parece otro dardo clavado en el centro de la diana del pop redondo y sin pretensiones grandilocuentes, auténtica artesanía al servicio del oyente, pequeñas píldoras capaces de dar una pincelada de color a nuestra existencia en este valle de lágrimas (que no lo digo yo, que lo dice la Biblia. Amén). En este octavo corte del disco, la banda funciona como una máquina perfectamente engrasada, con unos engranajes bien sincronizados y que se suceden en sus labores con una precisión germánica; voces, guitarras, batería, bajo, todo está en su sitio, nada falta y nada sobra. "Insane" vuelve a dejarnos ese amable regusto del country en su melodía y, sobre todo, en la voz de Anita, que se mueve a lo largo del disco entre las susurrantes divas de los 60's, las voces negras de los girl groups más spectorianos y los registros más dulces de algunas figuras femeninas del country. "Stuck In Champagne Jelly" es otra de mis favoritas, me gusta mucho cómo empieza, y creo que los comienzos son muy importantes, a veces son los que deciden si continúas con un libro o si apagas la tele y dejas de ver una película, en el caso que nos ocupa, lo que queremos es más, y así es como llegamos a una nueva muestra de guitarras con gancho, teclados infecciosos, baterías perfectamente medidas y, sobre todo, voces tan bellas que a veces asustan. "In Foresight Of An Injured Knee" airea el lado más folk de la banda y los vuelve a aproximar al country más íntimo, todo ello perfectamente arropado por unos músicos que hacen pop como pocos saben hacerlo y por una trompeta maravillosa que hace entrada en el tramo final de la canción; pura ambrosía. Y lamentablemente todo tiene su final, de modo que "A Tale of Summer Daybreaks" se encarga de cerrar el debut de Mittens, una nueva joya de pop con querencia folkie, un nuevo ejercicio de guitarras cristalinas y precisas como el bisturí de un cirujano, una nueva demostración de cómo empastar dos voces sin resultar empalagoso, y por si todo ello fuera poco, además silban, ¿que más se le puede pedir a una canción? "Deer Park Mirage" fue grabado en El Lado Izquierdo, en Madrid, a las órdenes de Dany Richter (otro "recomendado", ¿os acodais? AQUÍ), posteriormente fue retocado en el estudio casero de Guillermo Farré, el bajista y cantante de la banda, y más tarde fue masterizado en los estudios Yes Master de Jim DeMain, en Nashville; así es como, con la paciencia de un orfebre, Mittens fue construyendo esta auténtica maravilla que les eleva a los altares del pop patrio.

Pero he dicho que iba a hablar de dos bandas (aviso que la entrada de hoy es sólo para valientes, y me refiero a su extensión), una es Mittens, y la otra, como ya había adelantado es Wild Honey. ¿Qué tienen en común estas dos bandas? Pues un pilar básico en ambas formaciones, Guillermo Farré, bajista en Mittens y cerebro al frente de Wild Honey. El proyecto personal de Guillermo Farré, que toma su nombre del infravalorado disco de The Beach Boys, ve la luz en 2008 con su primera grabación oficial, el EP "Wild Honey", básicamente, Guillermo se acompaña de Anita Steinberg y de Cristina Gómez, que además de darle la réplica a las voces, se encargan de xilófonos, melódicas y otros cachivaches sonoros. Pero además de estas dos féminas, Guillermo también se ha sabido rodear de amigos que han contribuído de manera notable al nacimiento de este interesantísimo proyecto, que fue aclamado por la crítica nacional como uno de los mejores tabajos del pasado año. Una vez más, Guillermo ha tirado de casta y se ha lanzado a la autoedición, abriendo el camino por el que más tarde transitaría con Mittens: autoedición, descargas gratuitas y contacto directo con el seguidor. Así es como vio la luz "Epic Handshakes and a Bear Hug", un título grandilocuente bajo el que se esconde una nueva colección de gemas pop que no esconde sus influencias, lo que contribuye a enriquecer el repertorio y dota al conjunto de una gran personalidad, además de dejar bien palpable que el conocimiento musical de su autor es enciclopédico. El disco se abre con "Whistling Rivalry", una canción capitaneada por un magnífico ukelele que la emparenta directamente con "Marblehead" el tema con el que abren fuego Mittens en "Deer Park Mirage". "Whistling Rivalry" se resume en unas voces aterciopeladas, una curiosa percusión y una evocadora trompeta; magia pop desde el minuto uno. El segundo corte se titula "1918-1920" y confirma los presagios que nos asaltan tras exponernos al primer tema, sí, ésto es pop del de verdad, con una producción cuidada, sin llegar a resultar recargada, y con unas voces limpias y perfectamente empastadas, la música que lleva volviéndonos locos más de cuarenta años; sin duda, "1918-1920" es uno de los mejores momentos del disco. "To Steal A Piece Of Art" es el tema que más denota la mano del productor del disco, ni más ni menos que Brad Jones, y es que es una canción que recuerda alguna de las composiciones que Josh Rouse ha cocinado en estos estudios, un pop semiacústico y muy bien arreglado que al de Nebraska se le da de maravilla, y que nuestro Guillermo Farré también parece dominar a la perfección. "The Big Parade" es un vals de juguete, una coqueta canción que no debe pasar desapercibida, una de esas joyas que se esconden tras una engañosa sencillez. "Gold Leaf" se acerca a los compases de la bossa nova, consiguiendo un maravilloso resultado apoyándose en unas magníficas melodías vocales y en uno precisos punteos de guitarra y unos susurros de trompeta que acercan la canción a coordenadas más psicodélicas; otro gran momento del disco. "Hal Blaine's Beat" se encarga de afianzar el rumbo del disco, acercándonos al Rouse más juguetón envuelto en el caramelo pop que tan bien sabe cocinar Guillermo Farré.

Pero las dos grandes joyitas del disco vienen de la mano, se trata de "Brand New Hairdo" y de "Isabella", dos ejercicios de psicodelia minimalista y de pop cristalino. La primera es un vals compuesto con lo mínimo y cimentado en un trabajo vocal más que notable, mientras que la segunda es una contagiosa melodía pop llena de matices escondidos tras un contagioso ukelele; creedme, he escuchado esta canción cientos de veces y cada vez me gusta más, simplemente dejaos llevar, me lo agradeceréis. "My Bride In Black Gloves" continúa la línea marcada por sus antecesoras, pero lo hace complicando un poco más la madeja, introduciendo cambios de ritmo y abandonando ese aire amateur que tanto engancha en "Brand New Hairdo " e "Isabella". "Kings of Tomorrow" es una de las canciones más serias del disco, y digo esto no porque resulte aburrida, sino porque está muy bien planteada y podría sonar en cualquier emisora de radio sin que nadie se sonrojase, aunque bueno, a la mayoría de emisoras de radio no les interesa este tipo de propuestas, basta con darse una vuelta por el dial para comprobarlo, yo sigo sin entender cómo discos como éste continúan siendo minoritarios, en fin, vil negocio el de la música, amigos. "One Word Prayer" retoma el ritmo de vals que tan buenos resultados le da a Guillermo Farré y lo hace para adornar una canción que abre con un teclado y con una atmósfera totalmente beatle que más tarde se encamina hacia latitudes californianas de la mano de los hermanos Wilson, todo ello con una instrumentación y unas voces de matrícula de honor. Y por último "Done It Forever", que abre con un piano trotón que recuerda al standard "My Baby Just cares For Me" para acercarse más tarde al peculiar universo de Guillermo Farré, aquel en el que los ukeleles y los instrmentos de juguete campan a sus anchas y suenan como la mejor de las filarmónicas; una pildorita de poco más de un minuto que sirve para despedir el disco, en fin, al menos nos queda el consuelo de volver a pulsar el play y disfrutar de nuevo de esta maravilla.

En la actualidad, Mittens se encuentra presentando "Deer Park Mirage", mientras que Wild Honey acaba de publicar una nueva referencia, en este caso en el sello Jabalina, dentro de la serie Jabalina Love Songs, se trata de un 7" compuesto por tres canciones nuevas. Dicho todo esto, espero que os aproximéis a estos dos notabilísimos trabajos, que los descarguéis, tal y como las bandas desean, y que los disfrutéis, pero sobre todo que los compréis, porque además del contenido, el continente también es una pequeña joya en ambos casos; vinilo (rojo en el caso de Wild Honey) más CD, todo ello realizado con un mimo impecable y con dos maravillosas portadas. Por último os dejo con unos interesantísimos enlaces, que, continuando con esta entrada llena de excesos, son un buen puñado. Os dejo los enlaces a las respectivas webs de las bandas, además de sus correspondientes páginas en myspace, pero no sólo eso, completando estos cuatro enlaces, podréis hallar el atajo electrónico a Bandcamp, sitio donde ambas formaciones, tanto Mittens como Wild Honey, tienen alojada su discografía completa para que os la podáis descargar de manera totalmente gratuita. Por si esto fuera poco, os dejo dos reseñas de, una de "Deer Park Mirage" en Jenesaispop, y otra de "Epic Handshakes and a Bear Hug" en el blog Los Mundos de Fede, y como guinda del pastel, he añadido un enlace a los conciertos de Radio 3, donde podréis disfrutar integramente de la actuación de Wild Honey en este, lamentablemente maltratado, programa de nuestra televisión pública, la única que parece medianamente interesada en la música de calidad. Y además, para rubricar esta descomunal entrada, una buena dosis de videos, el clip oficial del tema "Deer Park Mirage" (atención a la puesta en escena y a la ejecución de este vídeo que es una pasada) de Mittens y una entrañable interpretación de "Isabella" de Wild Honey que hará enternecerse hasta al más duro de la muchachada, y no se vayan todavía, porque además he agregado dos videoentrevistas de cada una de las bandas; ¿de verdad alguien os da algo más por menos? No contestéis a esta estúpida pregunta y simplemente hacedme un favor, disfrutad de la música de Mittens y de Wild Honey, eso es lo verdaderamente importante. Espero que os guste.

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MITTENS EN BANDCAMP

RESEÑA DE DEER PARK MIRAGE EN JENESAISPOP



PÁGINA WEB DE WILD HONEY

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WILD HONEY EN BANDCAMP

RESEÑA DE EPIC HANDSHAKES AND A BEAR HUG EN LOS MUNDOS DE FEDE


WILD HONEY EN LOS CONCIERTOS DE RADIO 3

sábado, 23 de octubre de 2010

Neutral Milk Hotel- In The Aeroplane Over The Sea (1998)


Hay muchos tipos de discos, infinidad, pero a mí me gusta agruparlos en cuatro grandes familias: 1- Los discos con gancho, es decir, aquellos que te atrapan desde la primera escucha. Suelo asociarlos con sonidos muy melodiosos y con estilos próximos al pop en todas sus variantes. 2- Los discos repelentes. Sobran las explicaciones, aquí tienen cabida todos aquellos discos que por fobias o manías personales se me atragantan desde que suenan los primeros compases, también me refiero a aquéllos que nunca escucharía por simples prejuicios sonoros (yo soy yo y mis prejuicios), véase techno, house, y electrónica variada, además de la radiofórmula más exasperante. 3- Los discos que me gustaría que me gustasen. Son aquellos a los que me acerco por referencias externas, bien de amigos o de medios especializados, discos que los demás tienen en muy alta estima y que a mí, por mucho que lo intento, no me dicen nada. Me pasa mucho con esos discos que se catalogan como "de culto" o de "obra maestra", en cuanto oigo un calificativo así para un disco me echo a temblar. 4- Y por último, mi familia favorita, los discos que van ganando con el tiempo. Son esos discos que en la primera escucha no me dijeron gran cosa, y que según me voy exponiendo a su seductor influjo acaban atrapándome; discos que poco a poco se van ganando un huequecito en mi corazón, discos que acaban enamorándome como una obra de arte completa, como un todo; desde la portada hasta todas y cada una de sus canciones. El disco que se asoma hoy a Rainy Day Music es precisamente uno de ésos, un disco al que me acerqué por mera curiosidad, que no me atrapó instantáneamente sino más bien al contrario, uno de esos discos que acaban siendo imprescindibles en tu vida. Ojalá os ocurra a todos vosotros lo mismo, espero que quienes conozcáis "In The Aeroplane Over The Sea" de Neutral Milk Hotel, lo tengáis enmarcado en el cuarto de los grupos, y que quienes no lo hayáis escuchado nunca, os quedéis gratamente sorprendidos; eso sí, recordad que no sirve de nada dedicarle una sola escucha, tendréis que insistir, como con el gin tonic, que al principio resulta amargo pero con el tiempo acaba entrando en el Olimpo de nuestros vicios favoritos.

Neutral Milk Hotel es una banda misteriosa por diferentes motivos, su formación, sus grabaciones, su extraña andadura en una industria que, probablemente, ellos nunca se tomaron demasiado en serio; todo ello hace que sean la formación idónea a la que colgarle el tópico cartelito: "de culto". Pero no tengáis miedo, jóvenes, ignorad toda esa dialéctica sobada y aprendida y acercaos sin prejuicio a la música de estos muchachos, que no solucionará vuestros problemas pero que os ayudará a tener una existencia más placentera en esta escombrera llamada planeta Tierra. Hablar de Neutral Milk Hotel es básicamente hablar de Jeff Mangum, cerebro, letrista, guitarrista y vocalista de la banda. En un artículo escrito por Phil McMullen en 1996 se habla de Neutral Milk Hotel como de un concepto más que de una banda al uso, sea como fuere, dicho artículo está redactado antes de que "In The Aroplane Over The Sea" viese la luz, cosa que haría dos años más tarde, lo que está claro es que Mangum es la pieza clave en la formación y que sin su desbordante talento y su peculiar voz, nada sonaría igual. La infancia de Jeff Mangum transcurre en Louisiana, donde cultivará sus primeros recuerdos musicales, que serán muy variopintos, yendo desde el soft rock de los 70's que escuchaba su madre hasta los primeros Minutemen, pasando por los discos de Coltrane, psicodelia e incluso folklore búlgaro. En 1983 el punk rock surge como una revelación en la vida de Jeff, quien con tan sólo 13 años formará su primera banda, Maggot, una formación que buscaba, en palabras del propio Mangum, convertirse en la banda más desagradable del panorama musical. Son los primeros flirteos de Jeff con la música, su primer contacto con los instrumentos y con otros músicos. Un poco más tarde abandona las consignas del punk y se aproxima a latitudes más melódicas, junto a Will Cullen Hart y Alan Doss se muda a Athens y forma Cranberry Life Cycle, comienza una etapa de experimentación y de búsqueda de sí mismo que desembocará en una nueva formación, The Synthetic Flying Machine. Esta última banda podría considerarse el embrión de Olivia Tremor Control, una nueva formación en la que el musicalmente promiscuo Jeff Mangum también se verá involucrado. En los primeros 90's Jeff realiza una serie de grabaciones caseras bajo el nombre de Milk, algunas de ellas las agrupa en cassettes, unas cintas tendrán título, otras no; es una etapa en la que empiezan a aflorar las bases de lo que será Neutral Milk Hotel. Durante esos primeros años, Mangum vive en un estado de absoluto desempleo, alojado en habitaciones de amigos y grabando compulsivamente sus canciones. En 1993 se traslada con su amigo Robert Schneider a Denver, donde verá la luz, un año más tarde, la primera grabación bajo el nombre de Neutral Milk Hotel, se trata de un 7" titulado "Everything Is" en el que contará con la ayuda de varios amigos y de conocidos que se unen a su, todavía embrionario, proyecto. Enumerar la discografía de Mangum es un trabajo tan complejo que ni siquiera lo voy a intentar; su producción es confusa y se nutre de cassettes y EP's de tiradas reducidísimas, aún hoy en día siguen apareciendo grabaciones caseras de este peculiar genio que permanecían olvidadas en algún cajón. Es por eso que me centraré exclusivamente en su producción como Neutral Milk Hotel (al menos la que comprende sus tres principales grabaciones), aquella que concierne a este primer EP y sus dos LP's.

Jeff Mangum se moverá entre Denver y New York, a la vez que continuará con su compulsiva actividad de grabar cassettes, algunas de ellas verán la luz en forma de reducidísimas tiradas, será el caso de Invent Yourself a Shortcake, Beauty y Hype City. En 1996 verá la luz el primer LP de Neutral Milk Hotel, bajo el nombre de "On Avery Island", en él Mangum estará acompañado de varios de sus amigos: Robert Schneider, productor además del disco, e integrante de The Apples In Stereo, Rick Benjamin, que formaba parte de The Perry Weissman 3, y Lisa Jansen, integrante del dúo Secret Square. Con esos mimbres Jeff Mangum realiza su primer largo, su trabajo más ambicioso hasta el momento, y lo hace arropado por un sello serio y respetado en el mundo independiente, como es Merge. La mayor parte del disco se graba en Denver, una ciudad donde también tomará forma The Elephant 6, un proyecto capitaneado por Schneider y que consiste en una agrupación de bandas, concretamente The Apples in Stereo, The Olivia Tremor Control, Neutral Milk Hotel, Beulah, Elf Power y Of Montreal; seis formaciones que se agrupan bajo un nombre y un mismo sello discográfico con el objetivo de compartir material e ideas, una romántica forma de apoyarse los unos a los otros que acabaría devorada por el éxito de algunas de las bandas integrantes del colectivo. Romanticismos musicales aparte, y volviendo al tema que nos ocupa, "On Avery Island" será un trabajo muy bien recibido por la crítica, que se rinde ante la imaginación compositiva y el talento de Mangum, y que se ve gratamente sorprendida por unas letras oscuras y ácidas que son muy bienvenidas en un momento de cierto adocenamiento musical como el que se vivía a mediados de los 90's. La puesta de largo de Mangum como Neutral Milk Hotel deja ya entrever por donde van a ir las cosas en su segundo (y último) trabajo; los originales arreglos, los cambios de ritmo, el fuzz y la melodía, las trompetas y los instrumentos más rebuscados hacen acto de presencia en "On Avery Island", dotando al conjunto de una enorme fuerza expresiva y sonora y de una llamativa frescura, fruto de una combinación de rabia y melancolía, de tristeza y energía juvenil, de pasajes oscuros y de soleadas melodías, todo ello aderezado con la irrepetible voz de Jeff Mangum. Durante el transcurso de una entrevista con motivo de la presentación de "On Avery Island", Mangum reconoce estar cansado de ir dando tumbos por la vida, es consciente de que siendo muy joven eligió un camino muy complicado que le llevó a rozar una vida más propia de un vagabundo que de un muchacho de su edad. Afortunadamente todo acabó bien, en parte por la ayuda de sus amigos y, desde luego, por su innegable talento, es por eso que ahora que acaba de estabilizarse con el lanzamiento de su primer LP aprecia sobremanera esa tranquilidad y necesita la quietud de un hogar para seguir componiendo y trabajando, un hogar que no ha tenido en los últimos diez años. Bajo esa premisa de estabilidad Mangum se sumerge en la composición de su segundo LP, un trabajo que verá la luz en 1998 bajo el título de "In The Aeroplane Over the Sea".

Entre julio y septiembre de 1997 Jeff Mangum se reúne con su amigo Robert Schneider y una serie de músicos y amigos para grabar el segundo largo de Neutral Milk Hotel, a partir de entonces ya nada será igual. Mangum estará acompañado por Jeremy Barnes, que estará al frente de la percusión y del órgano, Scott Spillane, que se encargará de los metales, y de Julian Koster, que tocará el banjo, el acordeón, el serrucho, y otros ingenios musicales; ésta será la formación más estable que tuvo la banda, los culpables de un disco memorable. Schneider se encargará de nuevo de la producción, de hecho la mayor parte del LP está grabada en Pet Sounds, el estudio de Schneider en Denver. Se puede hablar de "In The Aeroplane Over The Sea" como de un disco conceptual, puesto que se inspira en la vida y destino de Anna Frank, el propio Mangum reconoció que muchas de las canciones del disco se basan en una serie de sueños recurrentes que tuvo, y en los que una familia judía de la Segunda Guerra Mundial era la protagonista. La crítica no tardaría en rendirse a los pies de Jeff Mangum, todo el mundo hablaba maravillas de su capacidad para inventar arreglos imposibles y tremendamente originales, al mismo tiempo que alababan su vehemencia a la hora de interpretar, su lirismo y su peculiar registro vocal. Todo el mundo intentaba definir el estilo de Neutral Milk Hotel, ellos mismos bromeaban al respecto calificándose como una banda de fuzz-folk, sea como fuere el segundo largo de Mangum y los suyos fue capaz de vender 200.000 copias, una cifra importantísima para una banda independiente, y una verdadera barbaridad tal y como están las cosas hoy en día. Pero ¿qué hace de "In The Aeroplane Over The sea" un disco tan especial? Probablemente su carácter único, es uno de esos discos que tienen un halo irrepetible, una de esas grabaciones que parece haber captado a un grupo de amigos haciendo lo que verdaderamente les gusta y en pleno estado de gracia. Sin duda, también le confiere un encanto especial el aura misteriosa que rodea a la banda y, sobre todo, al propio Mangum, ya que después de este disco no volvería a encerrarse en un estudio; pero ésa es otra historia. En "In The Aeroplane Over The Sea" Jeff Mangum demuestra haber madurado todas las ideas que asomaban tímidamente en "On Avery Island", ahora tiene más claro cuál es el ritmo compositivo, cómo se enlazan las canciones, incluso su manera de interpretar es más dramática, dotando de más intensidad al conjunto. El album se abre con un tema un tanto tramposo, y digo esto porque escuchando "The King of Carrot Flowers Pt.1" uno es incapaz de predecir lo que se le avecina, y no porque sea una mala canción, ni muchísimo menos, sino porque recoge el lado más melódico y pop de la banda, se trata de un bonito tema de aires folk que muestra, probablemente, al Mangum más contenido de todo el disco. Después de la primera parte viene la segunda, y la tercera, de modo que el segundo corte del disco se titula "King of Carrot Flowers Pt. 2-3", que comienza con un desconcertante "I Love You Jesus Christ" sobre un fondo instrumental hipnótico que se rompe en torno al minuto con una guitarra eléctrica y con la entrada de la batería, metales y un apabullante bajo con fuzz, entre otros instrumentos; nos acaban de romper la cintura y sólo llevamos dos canciones. Tras el exceso instrumental y sonoro del segundo corte, Mangum decide darnos un respiro con, según mi humilde mi opinión, el tema más bonito del disco, la canción que da título al LP, "In The Aeroplane Over The Sea", con una guitarra acústica preciosa y un Mangum iluminado, haciendo gala de una voz única, que se mueve entre el éxtasis y la angustia, todo ello se adereza con un serrucho musical, que funciona como un theremin casero y una trompeta; impagable. El cuarto tema del disco se titula "Two-Headed Boy" y continúa con el aire acústico del anterior corte, pero en este caso lo hace para secundar a un Mangum desatado que pasa de un registro más calmado y grave a otro más agudo y dramático, todo ello envuelto en una letra críptica y sin ningún otro aderezo; sin duda uno de los momentos más brillantes del disco.

Los estertores finales de "Two-Headed Boy" enlazan con "The Fool", el quinto tema que tiene un atractivo aire de fanfarria fúnebre, influencia, tal vez, de la curiosidad que despierta en Mangum el folklore búlgaro, se trata de una maravillosa transición para llegar a "Holland 1945", otra canción trampa. En "Holland 1945" reaparece el bajo con fuzz, se trata de un tema de estructura pop, convencional, probablemente el tema más alegre del disco, de no ser por su letra: "The Only girl i've ever loved was born with roses in her eyes but then they buried her alive, one evening 1945"; ésta parece ser una de esas composiciones inspiradas en los sueños de Mangum con la familia Frank, o al menos eso podemos deducir de la letra. Se trata de una magnífica canción que consigue un perfecto equilibrio entre los momentos más acústicos y los eléctricos, entre los pasajes más dramáticos y los más reposados, y entre el Mangum más vehemente y el más místico. El séptimo tema del disco es "Comunist Daughter", personalmente el principio me recuerda a los temas más accesibles de Mercury Rev, con una trompeta fantástica, que aporta a la canción lo justo y en el momento exacto. Pero la letra es marca de la casa y en este caso nos descoloca con unas extrañas connotaciones sexuales, una joyita de apenas dos minutos. Le sigue "Oh, Comely", una nueva aproximación folkie que elude todo convencionalismo para acabar convertida en una canción de más de ocho minutos que se mueve entre lo oscuro y lo místico, y en la que la sencilla instrumentación (únicamente una guitarra acústica) contrasta con la compleja estructura vocal y con una letra tenebrosa y enrevesada. En el tramo final aparecen de nuevo unos sedosos metales arropando la voz de Mangum, completando un cambio de registro que llevará la canción al clímax interpretativo. "Ghost" es uno de los grandes momentos de "In The Aeroplane Over The Sea", un tema repleto de épica en el que la banda se despliega en todo su esplendor: electricidad, fuzz, metales, teclados, una batería grandiosa, una verdadera orgía sonora, auténtica psicodelia de final de siglo. El ritmo de la canción va in crescendo y la voz de Mangum no pierde el pulso, haciendo gala de unos agudos fantasticos. A continuación nos encontramos con "The Penny Arcade in California", el décimo corte del disco, un instrumental que enlaza perfectamente con su antecesor y que se sumerge en una atmósfera folk con gaita de por medio, para finalmente desembocar en la última canción de "In The Aeroplane Over The Sea", "Two-Headed Boy, Pt.2", un tema acústico que retoma el halo de "Two-Headed Boy" pero con una interpretación más comedida; la manera perfecta de devolvernos a nuestra casa sanos y salvos después de un viaje desconcertante, hipnótico y apasionante.

Tras el éxito de "In The Aeroplane Over The Sea" el misterio que pende permanentemente sobre la figura de Jeff Mangum se acrecenta. Es de suponer que una personalidad como la de Mangum no busca el éxito, y mucho menos el éxito rápido y efervescente que en ocasiones brinda el turbio mercado discográfico, a pesar de todo, se encontró de frente con él, sin poder esquivarlo. Después de un año girando, presentando su segundo LP, la banda decide tomarse un respiro, llegando a cancelar algunos shows, entre ellos una oferta para acompañar a R.E.M. Durante este período de tiempo, algunos miembros de la banda colaboran en sus otros proyectos y Mangum ofrece, de manera ocasional, algún concierto en pequeños locales y para una audiencia compuesta casi exclusivamente por amigos. Cuando los medios le interrogan acerca de su descanso, y sobre todo de su material y de si está preparando algún disco nuevo, él simplemente contesta: "No lo sé, sería genial, pero a veces tengo serias dudas". Se habló acerca de un disco de rarezas que vería la luz en Orange Twin Records, finalmente el propio sello desechó la idea y lo comunicó, tras años de rumores, en 2005. Desde que en 1998 "In The Aeroplane Over The Sea" viera la luz, sólo ha habido reediciones de los trabajos de Neutral Milk Hotel y, como única novedad, un disco que recoge un concierto de Jeff Mangum en una cafetería de Athens, Georgia. Con la llegada del nuevo milenio podemos dar a Neutral Milk Hotel por disuelto, Mangum colaborará en trabajos de varios de sus amigos y de manera muy esporádica ofrecerá algún concierto, o más bien un pequeño set de canciones, poco más. En 2005 "In The Aeroplane Over The Sea" es reeditado por Domino Records en el Reino Unido, esto supondrá un redescubrimiento para las nuevas generaciones y una nueva puesta en valor de este importante trabajo. Los popes de la nueva música alternativa y las bandas más cool del momento reconocen la influencia de Neutral Milk Hotel en su música, será el caso de Arcade Fire o de Franz Ferdinand. Desde entonces hasta ahora poco más, Mangum ha aparecido en algún concierto de amigos suyos, ha probado suerte vendiendo sus propios dibujos, o guitarras decoradas por él mismo al precio de 900 dólares, y su aparición más destacada tuvo motivo con lugar de un acto benéfico a favor de su amigo Chris Knox. Jeff Mangum no parece interesado en encerrarse en un estudio a cocinar un nuevo disco, es probable que tenga nuevas canciones, seguro que las tiene, y casi seguro que son buenas, pero eso ya lo hizo una vez y el resultado fue irrepetible. Para muchos "In The Aeroplane Over The Sea" es el mejor trabajo de Mangum, para otros ha supuesto su sepultura profesional, el interfecto, de momento, sigue sin pronunciarse, como un genio humilde que no da importancia a su trabajo, como alguien fiel a sus principios que no se casa con nadie y que elude la pompa y los oropeles por los que tantos otros suspiran.

Bueno, creo que esta vez he batido mi propio record, no puedo creer que hayáis leído todo esto, si es así, espero que no os haya aburrido. Ahora os dejo, como es costumbre, unos enlaces y unos videos. Neutral Milk Hotel no tiene página web oficial ni Myspace, como tampoco lo tiene Jeff Mangum como músico, de modo que os dejo los enlaces a un par de páginas creadas por fans que son bastante completas, echadles un vistazo porque merece la pena, sobre todo por las letras y por la discografía recopilada. También he añadido un enlace a la entrada que tiene la banda en Wikipedia, que está muy trabajada y tiene mucha información. He querido recoger una entrevista aparecida en Pitchfork y realizada a Mangum en 1997 poco antes del lanzamiento de "In The Aeroplane Over The Sea", y por último os dejo un curioso enlace a Google books, donde encontraréis un libro escrito por Kim Cooper y que se titula precisamente "In The Aeroplane Over The Sea", una obra en la que se profundiza en la figura de Jeff Mangum, sus orígenes, su eclosión y su trascendencia, así como en la historia de Elephant 6 y del resto de los integrantes de la banda y del colectivo. Y en esta ocasión, para completar este post de Guinness, os dejo tres videos. En primer lugar quiero deciros que no he encontrado un sólo videoclip oficial de Neutral Milk Hotel, conociendo la ideosincrasia de Mangum dudo que lo tenga, pero si alguien lo conoce y lo encuentra que hable ahora o que calle para siempre. De modo que me he decantado por tres actuaciones en directo; la primera muestra a Mangum solo en el escenario interpretando "Two Headed Boy", se trata de un concierto en The Knitting Factory, New York, el 7 de marzo de 1998, en plena presentación de su segundo LP. El segundo video pertenece al mismo concierto que el anterior y muestra en este caso a la banda completa interpretando "Ghost", y por último, el tercer video recoge una actuación de la banda en Athens, Georgia, en el 40 Watt Club, el 14 de octubre de 1997, justo después de haber terminado la grabación de "In The Aeroplane Over The Sea", y en el que precisamente Mangum aparece interpretando la canción que da título al disco. Y ahora ya sí, os dejo disfrutar de este fantástico disco, espero que os guste.




NEUTRALMILKHOTEL.ORG

NEUTRALMILKHOTEL.NET

NEUTRAL MILK HOTEL EN WIKIPEDIA



ENTREVISTA A JEFF MANGUM EN PITCHFORK

NEUTRAL MILK HOTEL EN GOOGLEBOOKS





NEUTRAL MILK HOTEL- IN THE AEROPLANE OVER THE SEA

viernes, 8 de octubre de 2010

Buffalo Tom- Sleepy Eyed (1995)


Siempre he mantenido una curiosa relación de amor-odio con el verano, por un lado no puedo soportar los rigores estivales, aborrezco el calor y sus consecuencias (que se lo digan a Camacho) pero al mismo tiempo me encanta la luz veraniega, sus noches interminables y esa sensación que te embarga y que te hace presagiar que ése va a ser el verano de tu vida; ese cosquilleo en la tripa no se tiene con ninguna otra estación. Y qué os voy a contar si además tienes dieciocho o diecinueve años recién estrenados; todos y cada uno de los veranos van a suponer un antes y un después en tu vida: amores fugaces, amistades que creemos que serán eternas, desengaños... todo un despertar emocional, un carrusel sensorial que nos marcará de por vida y que nos introducirá, con toda su grandeza y con toda sus miserias, en la vida adulta. Hoy he elegido un disco que puede sorprender a más de uno, porque quizás a priori no pueda parecer un disco muy lluvioso, pero para mí, que fue mi disco del verano de 1995, es un album lleno de matices y que refleja perfectamente lo que fue aquel y muchos otros veranos de mi vida; un disco que me deja un sabor agridulce y que está impregnado de esa terrible saudade que envuelve a los días finales del verano. He de reconocer que hacía mucho tiempo que no lo escuchaba, puede que tres o cuatro años, tal vez más, pero cuando el otro día coloqué "Sleepy Eyed" de Buffalo Tom en el reproductor algo se agitó dentro de mí e instantáneamente reconocí, recordé y repasé cada uno de sus temas como si me encontrase de nuevo en 1995. - Aprovecha todo lo que puedas, que sólo se tienen 19 años una vez - , aseveraba mi padre con la voz melancólica de la experiencia, y yo aproveché todo lo que pude, ¿o no? Aquel verano fue una época de cambios para mí, acababa de dejar atrás los oscuros años del instituto y empezaba una nueva aventura personal en la Universidad, esa mezcla de miedos, de recelos, de ilusión y de esperanza, se refleja perfectamente en este disco.

Buffalo Tom fueron una de las bandas abanderadas de lo que en la primera mitad de los noventa se dio en llamar rock alternativo,un verdadero cajón de sastre en el que tenían cabida formaciones tan heterogéneas como Sonic Youth, Dinosaur Jr., The Pixies o The Posies, entre otras. Etiquetas al margen, este trío de Boston ha conseguido dar forma a una carrera coherente y honesta, con siete discos de estudio, un directo y un buen número de singles y EP's aparte de colaboraciones en recopilatorios, más de veinte años en la brecha, siendo ejemplo de buen hacer y de cordura en un mundo tan alocado como es el de los mercados discográficos, les avalan. Bill Janovitz, a la guitarra, Chris Colbourn, como bajista, y Tom Maginnis, al frente de la percusión, forman Buffalo Tom a finales de los años ochenta. A la hora de elegir su nombre jugarán con los míticos Buffalo Springfield y con el nombre de pila del batería, Tom Maginnis. Concretamente en 1988 verá la luz su homónimo primer LP, un album repleto de distorsión, de feroces pedales que contribuyen a crear infranqueables muros de guitarras. Estos primeros Buffalo Tom rinden pleitesía a una banda que sin duda es también un ejemplo de honestidad y de longevidad, Dinosaur Jr., no en vano el propio J Mascis produce el disco y se encarga de tocar la guitarra en uno de los temas del LP. A pesar de las evidentes influencias palpables en este primer trabajo (de hecho algunos críticos se referían a la banda como Dinosaur Jr. Jr.), Buffalo Tom apuntan aptitudes más que de sobra para crear canciones con gancho, melodías pop envueltas en el duro caramelo de las guitarras afiladas; todo esto se evidenciará en su segundo trabajo. "Birdbrain" supone la segunda entrega del trío de Boston y, aunque J Mascis vuelve a hacerse cargo de las labores de producción, el sonido de Buffalo Tom se distancia de manera considerable con respecto al de su gran valedor, las guitarras suenan más pulidas, las voces más nítidas y la melodía se hace presente en la mayor parte de los temas ganándole terreno al ruidismo que tan en boga se encontraba al comienzo de la década de los noventa. Pero ese giro emprendido con "Birdbrain" se hará del todo patente con el tercer disco de Buffalo Tom, el maravilloso "Let Me Come Over", probablemente su mejor trabajo. Este disco supone un gran paso adelante en la configuración final del sonido y de la personalidad de Buffalo Tom, un disco en el que los sentimientos y la emoción toman las riendas desplazando definitivamente a la rabia eléctrica y ruidosa de sus dos primeros trabajos. El sonido de la banda ganará en matices, y tal vez parte de la responsabilidad recaiga sobre los productores, Paul Kolderie y Sean Slade, quienes aportan madurez y seriedad a la propuesta de Buffalo Tom, que empezará a ser celebrada gracias a unas monumentales y emotivas baladas que no tardarán en convertirse en marca de la casa. Aprovechando el éxito de "Let Me Come Over", Buffalo Tom apenas tarda un año en poner en circulación un nuevo trabajo, se trata de "Big Red Letter Day", un disco que sigue las directrices marcadas por su antecesor y que apuesta por un sonido todavía más nítido, siguiendo unas pautas más próximas al pop. Personalmente creo que "Big Red Letter Day" fue la gran oprtunidad perdida de la banda, y es que, después de la buena acogida de "Let Me Come Over", Buffalo Tom necesitaba hacer algo grande, un disco memorable que les situase en las cotas de popularidad que muchos de sus compañeros de generación estaban alcanzando. Pero el resultado no fue el esperado, no es que el cuarto disco de Buffalo Tom fuese un fracaso, ni mucho menos, pero desde luego no fue el disco que todos, incluídos ellos mismos, esperaban. En primer lugar la producción está muy pulida, los hermanos Robb, encargados de la misma, preparan un disco listo para sonar en las radios alternativas pero con aspiraciones de llegar al gran público, lo que obtienen es un trabajo que no cumple ni una ni otra expectativa. No quiere decir esto que la selección de canciones de "Big Red Letter Day" sea mala, ni siquiera mediocre, sino que simplemente no satisface las esperanzas que se habían depositado en este trabajo tras la escucha del magnífico "Let Me Come Over". Será dos años más tarde, en aquel verano que nos ocupa, cuando vea la luz "Sleepy Eyed", la respuesta a la decepción sufrida tras su cuarto disco, un album que se encargará de poner las cosas en su sitio.

Efectivamente "Sleepy Eyed" nos devuelve a Buffalo Tom en el mismo lugar en que los habíamos dejado tres años antes, es decir, cuando aparece "Let Me Come Over"; el quinto trabajo de estudio de la banda recupera la crudeza de sus primeros discos sin olvidarse de la fórmula magistral con la que compusieron su mejor album. El comienzo de "Sleepy Eyed" es abrumador, "Tangerine" es un temazo repleto de energía, una manera perfecta de abrir un disco, la explosión de emoción de los primeros días del verano. La energía de "Tangerine" se disuelve rápidamente dando paso a la amargura de "Summer", el verano se ha acabado y, una vez más, no ha sido el verano de tu vida: "Summer's gone a summer's song, you've wasted everyday, everyday" ¿cuántas veces os habéis sentido así? La desgarradora voz de Bill Janovitz traza una perfecta radiografía de ese verano frustrado y frustrante por el que todos hemos pasado, y forma un perfecto matrimonio con unas guitarras que dibujan de una manera sublime la mezcla de dolor y melancolía que resultan de todo ello. "Kitchen Door" se encarga de rebajar la tensión emocional y de darnos un respiro, instrumentalmente hablando es un tema más positivo y más relajado que "Summer", es la antesala a "Rules", el cuarto corte del disco que nos hace reencontrarnos con los Buffalo Tom más rockeros, más eléctricos. "It's You"comienza del mismo modo que "Tangerine", con la voz de Janovitz un paso por delante de los instrumentos, entrando a matar, acompañándole, la batería y las guitarras que desprenden una fiereza que contrasta con lo melancólico del texto, un temazo. El sexto corte es una de mis canciones favoritas de Buffalo Tom, una letra tremendamente triste y desconcertante acompaña a una melodía preciosa que la envuelve en un halo de melancolía como sólo el trío de Boston sabe hacerlo, ésa es "When You Discover". "Sunday Night" es otro monumento de canción, el tema más ambicioso del disco, con más de seis minutos de duración, con guitarras que te acarician y que de repente te golpean en el estómago, con una batería pesada y poderosa y una harmónica dulce que sirve de contrapunto perfecto a otra oda a la melancolía: "Where's the solace you can find at the bottom of your mind? Friends pushed me fom behind, i feel so empty i could die". "Your Stripes" retoma el registro más eléctrico y poderoso del disco y nos ofrece una canción con un trabajo de guitarras perfecto y con una energía apabullante. "Sparklers" nos devuelve a esos Buffalo Tom que a mí tanto me gustan, con un estribillo contagioso y potente y un Janovitz en estado de gracia. "Clobbered" es un medio tiempo que cabalga entre los Buffalo Tom más energéticos y los más reposados, es el eslabón perfecto para enlazar con el siguiente tema del disco, "Sundress". Y así llegamos a las tres últimas canciones de este "Sleepy Eyed", "Twenty Points" será la encargada de abrir fuego en este tramo final, un verdadero temazo con unas guitarras gloriosas, que van desde los sonidos acústicos al lap-steel pasando por los ramalazos eléctricos característicos de la banda, aunque en este caso más reposados; gloria bendita. "Souvenir" es un tema en la línea de "Sundress", una melodía con gancho en perfecto matrimonio con unas guitarras afiladas. Y por último, "Crueler", una canción que comienza muy reposada, con una guitarra muy limpia y que anuncia enseguida un cambio de ritmo que parece contenerse hasta que desborda finalmente en torno al minuto y medio, ese discurso de ida y vuelta, el juego entre lo dulce y lo amargo, la melancolía y la tristeza características de las letras de Buffalo Tom; todo ello hacen de "Crueler" el broche perfecto para cerrar el quinto disco de estudio de Buffalo Tom, el disco con el que consiguieron regresar, en parte, a la perfección de "Let Me Come Over", el disco con el que consiguieron de nuevo acariciarnos con su apabullante electricidad y su infinita melancolía.

"Sleepy Eyed" obtuvo buenas críticas y sonó en las emisoras de medio mundo, pero tampoco supuso el gran salto para Buffalo Tom, parecía que el reconocimiento y la fama que acompañaba a otras bandas se les resistía, sin duda, injustamente. En 1997 Bill Janovitz decide embarcarse en una aventura en solitario, es así como ve la luz "Lonesome Billy", que contará con dos invitados de lujo, Joey Burns y John Convertino, integrantes, en primer lugar, de Giant Sand y después de Calexico. A este primer trabajo en solitario le seguirán "Up Here" en 2001 y "Fireworks on TV!" en 2004, además Chris Colbourn, bajista de Buffalo Tom también se lanzará al ruedo con un nuevo proyecto al margen de la banda, lo hará en 2005 junto a Hilken Mancini, cantante y guitarrista de Fuzzy. Pero esto no quiere decir que Buffalo Tom se disolviera, de hecho en 1998 contraatacan con un nuevo trabajo, el fallido "Smitten", un album que será tachado de sobreproducido por la prensa, un disco con el que vuelven a caer en los errores de "Big Red Letter Day", pero esta vez trufados de pianos, cuerdas y trompetas. El varapalo que supone "Smitten" es serio, hasta el punto de que la banda tarda casi diez años en volverse a encerrar en un estudio de grabación, lo harán en 2007 para dar forma a su último disco hasta la fecha, "Three Easy Pieces", un disco que intenta retomar la senda de "Sleepy Eyed" y que devuelve al trío de Boston el prestigio que habían perdido con su anterior trabajo. En la actualidad la banda se encuentra trabajando en un nuevo album que podría ver la luz a finales de este 2010.

Y llegamos ya al final de este verano del 95, espero que os haya gustado este salto hacia atrás en el tiempo y que hayáis recuperado tantos recuerdos, sensaciones y emociones como yo. Regresamos por lo tanto al otoño, que es mi habitat natural, y para amenizar las inminentes tardes de lluvia típicas de esta estación os dejo con unos enlaces para aquellos (que no creo que sean muchos...) que no se hayan cansado de leer. Como siempre, os dejo con la web oficial y el myspace de la banda, he encontrado además un curioso blog, llamado Cuando éramos alternativos, en el que encontraréis una entrevista a Buffalo Tom que apareció en la revista Rock de Lux en 1993, y por último os dejo un link a la edición digital de la revista Comes with a smile, que recupera una entrevista hecha a la banda en 1998, eso sí, en lengua bárbara. Y en cuanto a los enlaces nada más, la verdad es que es sorprendente que una banda como Buffalo Tom tenga tan escasa repercusión en la red, se echa de menos algún especial, algún artículo completito y con una buena biografía, e incluso críticas de sus discos, si por no tener no tienen ni entrada en castellano en Wikipedia... En fin, espero que con el paso del tiempo se acabe recuperando y reconociendo el trabajo de Buffalo Tom en la medida en que se lo merecen. En cuanto a los vídeos, he encontrado un curioso documental en Youtube titulado "The Making of Sleepy Eyed", muy interesante, y por último he querido completar esta entrada con una actuación en directo de la banda, concretamente interpretando el tema "Summer" en la tele durate la promoción de "Sleepy Eyed". Os dejo ya disfrutar de este maravilloso disco, espero que os guste.

P.D. Se acabó Rapidshare, a partir de ahora los enlaces estarán alojados en Megaupload que funciona bastante mejor. En cuanto a las portadas, he de deciros que no las he escaneado yo, son bajadas de la red, espero que me disculpéis pero tengo un problema con la impresora y de momento no puedo escanear ni impimir nada, maldita tecnología moderna...




PÁGINA WEB OFICIAL DE BUFFALO TOM

MYSPACE DE BUFFALO TOM

ENTREVISTA A BUFFALO TOM EN RDL 1993 RECUPERADA POR CUANDO ERAMOS ALTERNATIVOS

ENTREVISTA A BUFFALO TOM EN 1998 PARA COMES WITH A SMILE





BUFFALO TOM- SLEEPY EYED