lunes, 29 de septiembre de 2008

Belle and Sebastian- If You're Feeling Sinister (1996)


Pocas veces en la vida tiene uno la oportunidad de escuchar un disco tan redondo como "If You're Feeling Sinister", uno de esos discos que cuando lo descubres te hace replantearte ciertas cosas. Permitidme que os explique, corría el año 1999 y este disco ya llevaba tres años en el mercado, los más modernos del lugar hablaban y hablaban sobre Belle and Sebastian y bendecían sus dos primeros discos, yo estaba inmerso en plena vorágine rockanrolera y aborrecía cualquier canción que pasase de los 3 minutos, mis neuronas funcionaban al grito de Gabba Gabba Hey y no tenía muy claro que era un oboe. De repente cae en mis manos un disco de los dichosos Belle and Sebastian, como la persona que me lo deja insiste mucho en que lo oiga, decido darle una oportunidad; esa primera escucha cambiaría para siempre mi concepción de la música y me abriría un nuevo mundo que, a día de hoy, no me canso de explorar. Eso es lo que ocurrió en los 41 minutos y 17 segundos que dura "If You're Feeling Sinister", auténtica medicina para escépticos del pop y arma arrojadiza de cortante filo para mentes llenas de prejuicios musicales.

Belle and Sebastian se forma en Glasgow en 1995, y el principal responsable de ello será un peculiar personaje llamado Stuart Murdoch. Murdoch era un fan irredento de la banda Felt, lo que le hizo abandonar Glasgow a principios de los 90's para irse a Londres a la búsqueda de Lawrence Hayward, líder de la citada banda, al cual no consiguió localizar. Deprimido, decide volver a Glasgow para comenzar sus estudios universitarios, será entonces cuando comience a componer sus primeras canciones y a escribir sus primeros relatos. Durante su formación recibe un curso relacionado con el mercado musical y tiene la idea de formar una banda con la que grabar un disco como proyecto final. A finales de 1995 recluta a los integrantes de la banda en un peculiar casting que tendrá lugar en una cafetería y en el que Stuart Murdoch se dejará guiar por su instinto; los elegidos fueron: Sarah Martin (violin), Stevie Jackson (guitarra), Chris Geddes (teclados), Stuart David (bajo), Richard Colburn (batería), Isobel Campbell (cello), y por supuesto Stuart Murdoch, que se convertirá en guitarrista y vocalista de este curioso proyecto. Los siete integrantes son estudiantes y deciden que la banda se quedará simplemente en un proyecto, un pasatiempo fugaz que no les robará demasiado tiempo, de hecho convienen que grabarán dos discos y desaparecerán. Por último se bautizan como Belle and Sebastian en honor a una novela del mismo título escrita por Cécile Aubry, y que trata de las desventuras de un joven llamado Sebastien y su perro, un mastín del Pirineo llamado Belle; esta historia se haría muy famosa a principios de los 70's gracias a una serie de televisión francesa e incluso tendría su propia versión nipona, a modo de dibujos animados al más puro estilo Heidi. En mayo de 1996 deciden autopublicarse un disco bajo el título de "Tigermilk", sólo se harán 1000 copias y sólo verán la luz en vinilo. Lo que en principio surge como un simple proyecto de fin de curso sin visos de continuidad se convierte en un fenónemo gracias a la mejor difusión posible, el "boca-a-boca".

De repente Belle and Sebastian se convierten en una sensación, y seis meses después de su primer disco ya tienen en la calle otro trabajo, al que llamarán "If You're Feeling Sinister", se acababa de gestar uno de los mejores álbumes de pop de los últimos 25 años. Muchos críticos afirman que este disco fue realmente el primero de la banda, ya que "Tigermilk" empezó a escucharse en círculos privilegiados (y todavía más privilegiados son aquellos que hoy poseen una copia de ese primigenio vinilo por el que hoy en día se pagan más de 100 euros) y era casi un trabajo artesanal realizado por la propia banda, "If You're Feeling Sinister" en cambio cuenta ya con el apoyo de una discográfica, lo que le permitirá una mayor difusión que supondrá la presentación de Belle and Sebastian en sociedad. Sea como fuere, el disco supone un auténtico bombazo que servirá para enterrar definitivamente al grunge, estilo que había acaparado toda la atención en la primera mitad de los 90's y que con sus distorsiones y sus berreos había desterrado durante una buena época la dulzura y la sensibilidad del pop inteligente. Belle and Sebastian le dan el tiro de gracia al grunge con un trabajo maravilloso; con trombones, cornetas, violines, cellos, con un cuidadoso trabajo de voces, con una música que se creía en desuso y que volvía su mirada a la década musical por excelencia, los 60's. Se abría así una puerta que llevaba unos cuantos años cerrada, la de una música atemporal, a medio camino entre la luminosidad y la nostalgia, entre el hedonismo y la introspección, entre el technicolor y el evocador blanco y negro, con unas letras inteligentes e inteligibles y con un fino sentido del humor que bebe de la literatura y el cine a partes iguales; un camino por el que, en lo sucesivo, transitarían numerosas bandas, aunque ninguna con el éxito y el "savoir faire" de Belle and Sebastian. Resulta imposible elegir un único tema de este disco, aunque podríamos decir que los tres primeros están un peldaño por debajo de los siete cortes restantes, a pesar de ello son tres canciones fantásticas que sirven de prólogo a un album que ya es un clásico del siglo XX. A partir del cuarto tema, "Like Dylan In The Movies", la calidad va in crescendo en una progresión que ya no se detiene hasta que el disco deja de girar; como paisajes ineludibles en este viaje podemos citar "The Fox In The Snow", "Get Me Away From Here I'm Dying" y "If You're Feeling Sinister", y se recomienda hacer parada y fonda en el último tema, "Judy and The Dream of Horses", simplemente impresionante.

Belle and Sebastian continúan su brillante carrera consagrados como la mejor banda de pop del momento y en 1997 editan tres EP's que no decepcionan, se trata de "Dog on Wheels", que verá la luz en mayo, "Lazy Line Painter Jane", que saldrá a la calle en julio, y "3.. 6.. 9 Seconds of Light", que se editará en octubre. La banda consigue desarrollar un estilo propio que va más allá de la música y de las letras y que se prolonga en las portadas de sus discos, que siguen todas una misma línea, e incluso en su actitud vital, fruto de una particular ideosincrasia que les llevará a tocar en iglesias o en librerías. En 1998 editan "The Boy with The Arab Strap", que para mí es el último de sus grandes trabajos, a partir de entonces su música transitará por caminos más convencionales, aunque sin perder la esencia primigenia de Belle and Sebastian, pero sin la inspiración y la frescura de sus primeros discos, sobre todo "If You're Feeling Sinister". En 1999 se reedita "Tigermilk", y un año más tarde la banda edita su disco más flojo, "Fold Your Hands Child, You Walk Like a Peasant", tras el cual Stuart David abandonará Belle and Sebastian para dedicarse a su propia banda, Looper. En 2001 Belle and Sebastian sorprenden con dos buenos EP's, "Jonathan David" y "I'm Waking Up to Us", y se encargan además de la banda sonora de la película de Todd Solondz "Storytelling" (estrenada en España con el título de "Cosas que no se olvidan"); será un año muy agitado en el que se embarcan en una gira interminable por Estados Unidos y Canadá, en mitad de la cual Isobel Campbell decide abandonar el barco para comenzar su carrera en solitario. En 2003 deciden cambiar de discográfica y retomar la senda perdida con un nuevo trabajo, "Dear Catastrophe Waitress", que será muy bien acogido por la crítica y que cuenta con su single más exitoso hasta la fecha, "I'm a Cuckoo", a pesar de ello ya nunca volverán a alcanzar el nivel de "If You're Feeling Sinister". El último trabajo, hasta el momento, de Belle and Sebastian es "The Life Pursuit", que vio la luz en 2006, y "Push Barman to Open Old Wounds", un disco editado en 2005 y que reúne todos los EP's anteriormente citados junto a rarezas y caras B, un disco desigual pero muy recomendable.

Personalmente sólo me queda desearos que disfrutéis de esta obra maestra del mismo modo que lo hice yo hace ya casi 10 años, y de la misma manera que lo sigo haciendo cada vez que lo escucho, para mí se ha convertido en uno de esos paisajes habituales en mi vida, uno de esos discos a los que regreso una y otra vez. De regalo os dejo, como de costumbre, unos enlaces que creo que pueden interesaros y el video de "Is It Wicked Not To Care?", un tema perteneciente a su tercer disco y que cuenta con la peculiaridad de que quien canta no es Stuart Murdoch, sino Isobel Campbell. Espero que os guste.





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BELLE AND SEBASTIAN- IF YOU'RE FEELING SINISTER

jueves, 25 de septiembre de 2008

Lester Young with The Oscar Peterson Trio (1952)


Hay muchas razones que convierten al jazz en la música más interesante y rompedora del siglo XX, y hay pequeños detalles que hacen que su sonido goce de una frescura crónica de la que muchos estilos musicales carecen. El jazz suena atemporal, y además fue capaz en su momento de unir en un mismo estudio de grabación el talento de genios de la talla como los que se asoman hoy aquí en este post de Rainy Day Music. Lester Young es una auténtica leyenda del jazz, un gigante del saxo tenor que supo distanciarse de la influencia ejercida por Coleman Hawkins, creando un estilo propio que le convertiría en referente para muchos saxofonistas en los 50's y los 60's. Oscar Peterson es uno de los mejores pianistas del siglo XX, su destreza, su rapidez y su técnica le confirieron un carácter único, lo que no le impedía hacer gala de una enorme versatilidad a la hora de atacar diferentes estilos. Los dos maestros aunarían sus fuerzas en el año 1952 para grabar dos discos, "Lester Young with The Oscar Peterson Trio" y "The President plays with The Oscar Peterson Trio", ambos están reunidos en este CD editado en 1997.

Lester Young fue conocido en los ambientes jazzísticos como "The President" (también "Pres"), apodo acuñado por la mismísima Billie Holiday. Era un hombre tranquilo y reservado, capaz de interpretar la más emotiva balada pero también dispuesto a enfrentarse a ritmos frenéticos y festivos, como quedó patente en las grabaciones que hizo con la banda de Count Basie. Aunque pasó sus primeros días en New Orleans, podemos decir que Lester Young vivió en Minneapolis, donde tocó en una banda familar durante los locos años 20's, estudió violín, trompeta y percusión, y comenzó a tocar el saxo alto a la edad de 13 años. No tardaría en aproximarse al que será su instrumento, el saxo tenor, será en 1927, cuando se niega a realizar una gira por el convulso sur de los Estados Unidos, lo que le lleva a enrolarse en otra banda, los Art Bronson's Bostonians. A partir de entonces, podemos decir que el joven Lester funciona como un "freelance" que ofrece sus servicios a numerosos músicos y orquestas, poniendo a su disposición su mágico saxo. En 1934 tiene lugar su primer encuentro con otro grande del jazz, Count Basie, junto a él realizaría una serie de grabaciones míticas, sobre todo aquellas en las que acompañan a dos gigantes, Billie Holiday y Teddy Wilson. Lester Young y Count Basie formarán un matrimonio único, que se separa, se vuelve a reunir, se complementa, se necesita; durante las décadas de los 30's y los 40's desarrollan un repertorio único, es entonces cuando aflora el personal estilo de este saxo tenor, que estaba llamado a revolucionar el, por entonces emergente, mundo del jazz.

Corre el año 1943 y la vida de Lester Young está a punto de cambiar para siempre, el músico es llamado a filas para defender a su país en el enfrentamiento más cruel de la reciente historia de la Humanidad, la II Guerra Mundial. La violencia, el comportamiento irracional de los seres humanos, el odio y el racismo del que fue víctima el propio Lester Young, se marcarán para siempre a fuego en su memoria y en su alma, este gigante del saxo tenor ya no volverá a ser el mismo, y en lo sucesivo su vida cabalgará entre la depresión más profunda y el alcoholismo. A su regreso de la guerra se enfrentará al duro reto de reincorporarse a una sociedad que desconoce la dimensión de aquella tragedia, que prefiere festejar la victoria con grandes fastos, que alardea del "american way of life", que ignora la cruda realidad de un conflicto que se ha desarrollado a miles de kilómetros de sus hogares, que obvia la existencia de todo aquello que Lester Young es incapaz de olvidar. A pesar de ello, Lester engrasa su maquinaria y enseguida le llueven encargos y ofertas, muchas de ellas de la mano de Norman Granz. Para muchos críticos, el saxo de Lester ya no volverá a sonar del mismo modo que lo hacía antes de ser reclutado, ésa será la idea más extendida durante el final de los 40's y los primeros 50's; como suele ocurrir, una vez desaparecido Lester y analizada su producción hasta la saciedad, los expertos se han dado cuenta de que precisamente en estos años es cuando el mítico saxo tenor construye un monumento a la sensibilidad, a la emoción. Lester Young construye un muro que le separa del mundo exterior, ese mundo que no conoce ni comprende el sufrimiento que acompaña al músico desde que regresó de la guerra, Lester crea su propia realidad, su vocabulario personal compuesto por notas de un color único, un estilo a medio camino entre el bebop (sin caer en la profunda intelectualidad de la que hacen gala algunos intérpretes de este estilo) y el cool (sin rozar siquiera la frivolidad de algunos músicos de la época). A pesar de ello, el muro levantado por Lester Young resultaba frágil, y se rompía con gran facilidad, fruto, sobre todo, de su feroz adicción al alcohol. Lester se lamentaba de que los músicos blancos que le imitaban cobraban más dinero que él y gozaban de mayor reconocimiento, la frustración y la impotencia le llevaban a ingerir enormes cantidades de alcohol, su enfermedad se agudizaba conforme transcurría el tiempo, hasta que finalmente decidió dejar de comer, las consecuencias eran más que predecibles. Finalmente "Pres" falleció el 15 de marzo de 1959 en Nueva York, hoy en día se le reconoce como uno de los saxos tenores más influyentes de la historia del jazz, formando una santísima trinidad en compañía de Coleman Hawkins y John Coltrane.

Si Lester Young es considerado uno de los mejores saxofonistas de todos los tiempos, a Oscar Peterson se le venera como uno de los mejores pianistas. Este monstruo canadiense es un ejemplo de precocidad, comenzó a recibir clases de piano a los 6 años, y a los 14 ya había ganado un premio para jóvenes talentos; no tardó en demostrar la clase y los sonidos que era capaz de extraer a un teclado. Su primera experiencia en una banda tuvo lugar con la Johnny Holmes' Orchestra, siendo todavía un adolescente. Con tan sólo 20 años firma un contrato con Victor, entre 1945 y 1949 grabará 32 selecciones para este sello, en las cuales muestra una cierta querencia por el boggie-woogie y por el estilo y el swing Teddy Wilson y Nat King Cole. Un año más tarde Norman Granz descubre a Oscar Peterson y lo presenta como invitado sorpresa en el concierto Jazz at the Philharmonic; con apenas 25 años había llegado donde muchos ni siquiera eran capaces de imaginar, había tocado el cielo con la yema de los dedos.

En 1952 Oscar Peterson forma un trío junto al guitarrista Barney Kessel y el contrabajista Ray Brown, será una formación muy efímera, ya que tan sólo una año más tarde Kessel abandona el trío, según declarará cansado de tanta carretera, y será reemplazado por Herb Ellis. A pesar de la fugaz existencia de la primera formación de este trío, serán capaces de realizar algunas grabaciones memorables, entre las que destaca el maridaje del Trío de Oscar Peterson con el saxo tenor de Lester Young, es aquí donde se cruzan los caminos de nuestros invitados de hoy. Entre 1953 y 1958, el Trío de Oscar Peterson se convierte en uno de los mejores combos de la escena del jazz mundial, sus interpretaciones son complejas y algunos críticos le reprocharán al pianista canadiense el uso de demasiadas notas, "donde cualquier pianista utiliza 10 notas, Oscar Peterson utiliza 100" escribirán algunos. A pesar de ello, son años de gloria, hasta que en 1958 Herb Ellis abandona el Trío, el vacío que deja es tal que Oscar Peterson sentencia que ningún guitarrista será capaz de llenarlo, por ello para completar el Trío, contrata a un batería en lugar de un guitarra, se trata de Ed Thigpen. La formación Peterson-Brown-Thigpen se mantendrá en activo hasta 1965, la ausencia de guitarra dará lugar a un mayor protagonismo del piano de Peterson, su talento como solista emerge y sorprende, una vez más, al mundo del jazz. En 1968 Oscar Peterson grabará sus primeros discos como solista, sin otra compañía que la de su piano, lo hace para el sello MPS, más tarde, en 1972, grabará para el sello Pablo de la mano de Norman Granz, acompañado del guitarrista Joe Pass y de Niels Pedersen al bajo. Para entonces, Oscar Peterson ya es considerado una leyenda viva del jazz, un músico que ha grabado duetos con los más grandes y que ha colaborado en infinidad de discos (ése es otro de los argumentos que esgrimen en su contra los críticos, el hecho de haber grabado demasiados discos), tanto en solitario, como con su Trío, prestando su piano al servicio de monstruos como los trompetistas Dizzy Gillespie y Roy Eldridge, el pianista Count Basie, o, como bien sabéis, el legendario saxo tenor Lester Young. En 1993, un grave accidente cardiovascular dañaba seriamente su salud, debilitando considerablemente su mano izquierda. A pesar de las dificultades, Oscar Peterson fue capaz de volver a pisar las tablas del escenario, donde demostró que, sin estar al 100% de su capacidad, era un músico con unas dotes de improvosación fuera de lo común. Tras arrastrar durante más de una decada esta grave dolencia, Oscar Peterson fallecía el 23 de diciembre de 2007 en Mississauga, Ontario.

No es difícil imaginar que cuando se unen dos genios como los anteriormente mencionados, el resultado no puede ser sino explosivo. La primera formación del Trío de Oscar Peterson se da cita con Lester Young en esta grabación producida por Norman Granz, con el acompañamiento del batería J.C. Heard. Es el saxo tenor de "Pres" quien cobra un mayor protagonismo, interpretando un repertorio trufado por una serie de baladas memorables como "On the Sunny Side of the Street", "Almost Like Being in Love", "I Can't Give You Anything but Love", "There Will Never Be Another You", y "I'm Confessin'", donde el sonido etéreo y característico de Lester Young se hace omnipresente y confiere a esta peculiar reunión un ambiente especial, propio de una cita única e irrepetible. También Oscar Peterson goza de sus instantes de gloria, demostrando su compleja técnica y su personal swing, el acompañamiento perfecto para el metal de Lester Young. Esta edición de 1997 recoge todas las grabaciones que realizaron juntos estos dos genios, "Lester Young with The Oscar Peterson Trio" y "The President plays with The Oscar Peterson Trio", incluyendo el único tema en que Lester Young se atrevió a demostrar sus dotes como vocalista, "It Takes Two to Tango". Todas ellas son razones más que suficientes para hacer de éste un disco de necesaria escucha, un clásico de la historia del jazz; puede que muchos de vosotros no os fiéis del criterio de all music guide , pero simplemente os diré que a este disco se le conceden cinco estrellas sobre cinco, sobran las palabras.

De regalo os dejo, no un video, sino dos, para que podáis ver a los dos maestros en acción; en el primero encontraréis a Lester Young en una actuación televisiva del año 1958, en el otro video disfrutaréis de una actuación del Oscar Peterson Trio en su segunda formación, interpretando el tema "A Gal in Gallico", curiosamente también en 1958. Si queréis profundizar más en la figura de estos dos músicos, os dejo dos enlaces a la peculiar página Apolo y Baco donde encontraréis una biografía de ambos más completa. En otro orden de cosas, ¿recordáis a Alberto Montero? seguro que sí, pues bien, me enorgullece anunciaros que este prometedor y talentoso músico ha dejado un enlace directo para que os podáis descargar su disco completo desde Rainy Day Music, sólo tenéis que entrar en los comentarios del post que se le dedicó en este blog para encontrar la dirección de dicho enlace. Me gustaría que se lo agradecieseis como se merece, ya que no conzco muchos músicos que, teniendo un disco en el mercado, dejen un enlace en un blog de alguien a quien no conocen de nada para que todos aquellos que lo deseen puedan disfrutar de su música. Es un detalle increíble que espero sepáis apreciar, un millón de gracias Alberto. Ahora sí, os dejo con este maravilloso disco de Lester Young con el Trío de Oscar Peterson, perfecto para empezar el otoño. Espero que os guste.







BIOGRAFÍA DE LESTER YOUNG


BIOGRAFÍA DE OSCAR PETERSON


LESTER YOUNG WITH THE OSCR PETERSON TRIO

martes, 16 de septiembre de 2008

Una recomendación: Ángel Kaplan


Me encanta visitar tiendas de discos, pero tiendas de las de verdad, como las de antes, de las de toda la vida. Esas pequeñas islas dentro de las despersonalizadas urbes son como un barómetro cultural de la ciudad en la que se ubican, la ciudad en la que luchan desesperadamente por sobrevivir. Tengo la sensación de que si visito alguna ciudad y no consigo entrar a ninguna tienda de discos es como si no la visitase, como si mi cerebro no fuese a almacenar ninguna impresión acerca de ese viaje. Soy adicto a los ácaros del polvo, aunque me hagan estornudar, y al olor húmedo de los vinilos de segunda mano; necesito esas tiendas para sentirme cómodo en un destino, sea cual sea. Precisamente en una de esas tiendas me encontré con el disco que os recomiendo en estas líneas, fue hace apenas un mes en Oviedo. Buceando entre mágicas rodajas de vinilo asomó la cabecita esta maravilla que llevaba un tiempo buscando, el debut en solitario de Ángel Kaplan; un disco de pop cristalino, producido a la vieja usanza, un 12 pulgadas a 45 revoluciones, un formato en peligro de extinción. Os dejo con un texto extraído del myspace de Ángel Kaplan (¿cómo eran nuestras vidas antes de que existiesen inventos como Myspace?):

"Angel Kaplan es el cantante y guitarrista de Bubblegum, combo de powerpop con dos discos publicados en los sellos Snap!! y Rock Indiana, además de bajista de la actual formación de los legendarios Doctor Explosión. También ha tenido tiempo para realizar colaboraciones con artistas como Colin Hare (Honeybus) o The Cynics, vacas sagradas del garage norteamericano. Su último proyecto es un mini-lp compuesto por seis temas titulado "Transparent Dayze", grabado en Gijón en los estudios analógicos Circo Perrotti, con Jorge Explosión y Mike Mariconda (productor de infinidad de discos para Crypt Records, entre otros) a los mandos. Para la grabación se ha rodeado de músicos de lujo, incluyendo al propio Mike Mariconda, Pibli González (La Ruta, Feedbacks, Doctor Explosión), Luis Rodríguez (Alto Volto, Lucas 15, Nacho Vegas & Christina Rosenvinge), Miguel Herrero (Los Trashtornados), Sara Muñiz (colaboradora habitual de Manta Ray, Viva Las Vegas y Mus) y Marcos Montoto (Mockin' Byrds, The Real McCoyson).

La energía de sus otros grupos remite para dar paso a un sonido acústico e intimista, fuertemente influido por grupos británicos de los 60 (The Beatles, The Kinks) y sus coetáneos de la Costa Oeste norteamericana (The Byrds, Love), sin olvidar las bandas neo-psicodélicas de los 80 (Rain Parade, The Church) o más recientes luminarias del pop clásico y atemporal (Elliott Smith, Beachwood Sparks). Un proyecto tan especial merecía una edición a la altura, para lo cual ha decidido crear su propio sello, Lost Recordings, y ofrecer "Transparent Dayze" en vinilo de 12 pulgadas a 45 rpm, para obtener la máxima calidad de sonido, y en una edición de tan sólo 500 copias numeradas. "

¿No se os ponen los dientes largos? Sólo tenéis que escuchar temas como "Broken Toys", "Time Will Be Gone So Fast" o "Kid Kubrick" para daros cuenta de que este disco es una verdadera maravilla, pop facturado con un gusto exquisito, placer instantáneo y atemporal, al margen de modas y tendencias. De nuevo un 10, oro en el medallero olímpico de Rainy Day Music. Para que conozcáis mejor a Ángel Kaplan os dejo un enlace a su myspace, así podréis escuchar su música, y dos enlaces en los que encontraréis sendas entrevistas. Espero que os guste.



MYSPACE DE ÁNGEL KAPLAN

ENTREVISTA A ÁNGEL KAPLAN EN POWERPOP ACTION

ENTREVISTA A ÁNGEL KAPLAN EN SONICWAVE MAGAZINE

jueves, 11 de septiembre de 2008

Pelle Carlberg- In A Nutshell (2007)


Hubo un tiempo en el que parecía imposible hacer música pop sin caer en la más absoluta ñoñería, los discos de pop se volvían empalagosos y contenían tanto edulcorante que en la mayoría de las ocasiones se volvían indigestos. Afortunadamente el maravilloso pop de los 60's se empezó a reivindicar hace pocas décadas, y empezaron a aflorar una serie de bandas y de músicos fantásticos que habían permamecido en el olvido durante años, brillantes melodías que transmitían optimismo y trabajados arreglos que sirvieron de caldo de cultivo para toda una generación que ha redescubierto estos sonidos, los ha actualizado y los ha hecho propios. Poco a poco el tedioso indie pop fue dando paso a sonidos más elaborados que tenían como bandera el hedonismo y que abrían una nueva era para la música pop, fruto de ello aparecieron bandas como Belle & Sebastian o BMX Bandits, y se forjó una corriente que ha calado especialmente hondo en la Pérfida Albión y en los países escandinavos. Precisamente de uno de esos países, Suecia, procede nuestro invitado especial de hoy en Rainy Day Music, el señor Pelle Carlberg, un tipo que factura un pop de calidad, con un maravilloso sentido del humor que le acerca a genios de la talla de Jonathan Richman, y con unas melodías realmente contagiosas.

El bueno de Pelle nace un 21 de octubre de 1969 en una localidad sueca llamada Uppsala. Desde su adolescencia se muestra muy interesado en la música, y en la década de los 80's militará en varias formaciones, siendo Edson la más importante de ellas. Con Edson alcanzará cierto reconocimiento en su país a finales de los 90's, pero ya entrados en el nuevo milenio Pelle decidirá emprender su carrera en solitario en busca de una mayor libertad creativa. Enamorado de la música de los 60's, de monstruos como The Velvet Underground, Cat Stevens, Simon & Garfunkel o Van Morrison, y del pop de los 80's, con referentes en The Smiths, The Cure o The Pixies, Pelle Carlberg es un tipo sin complejos que hace música por y para divertirse. En 2005 firma su disco de debut en solitario, titulado "Everything Now", un trabajo en el que todavía mantiene algo del sonido de Edson, pero que ya apunta claramente un cambio de rumbo y un giro hacia una música en la que los sentimientos y el humor se dan la mano y conviven en perfecta armonía. Pero será dos años más tarde cuando salga a la calle el disco titulado "In A Nutshell", verdadera declaración de intenciones de este músico y, hasta la fecha, su obra maestra.

El disco se abre con "Pamplona", una ciudad de la que Pelle había oído hablar gracias a su padre, uno de esos suecos que se volvían locos en los 60's con los Sanfermines, la excusa perfecta para fabricar una canción de pop con mayúsculas. "I Love You Imbecile" es el single perfecto, una melodía contagiosa, de una ingenuidad irresistible y con un juego de voces fantástico en el que colabora la cantante sueca Ida Maria. El resto de los temas nos presenta a un Pelle Carlberg más maduro, que introduce arreglos más trabajados: piano, violines, metales, xilófonos; un artista con un pie en los 60's y otro en los 80's, un músico con una intuición increíble a la hora de facturar canciones inolvidables, un cantante poseedor de una voz personal y con un magnífico dominio del falsete, un poeta que maneja a la perfección la lírica costumbrista propia del pop. Entre mis favoritas del disco se encuentra la tierna "I Just Called To Say I Love You" (ojo, no tiene nada que ver con el hit ochentero de Stevie Wonder), la divertida "Clever Girls Like Clever Boys Much More Than Clever Boys Like Clever Girls", que cuenta con un estribillo inolvidable, y "Even A Broken Clock (Is Right Twice A Day)", esta última me parece una de las mejores canciones pop de la presente década, simplemente redonda.

El pasado 3 de septiembre salió a la calle el último disco de Pelle Carlberg, bajo el título "The Lilac Time", en su myspace podréis escuchar algunos de los temas como adelanto. La verdad es que no sé cómo ha tenido tiempo este sufrido obrero del pop para sacar un disco nuevo en poco más de un año (¡y tocando él la mayoría de los instrumentos!), ya que al consultar su agenda podemos comprobar que el ritmo de conciertos al que se ha visto sometido es tremendo. Como siempre, os recomiendo que si tenéis la oportunidad de verlo en directo no lo dudéis ni un segundo, sobre las tablas de un escenario es donde se desenmascara a los impostores, y a mí me quedó bien claro que Pelle Carlberg no lo era. Tuve la suerte de verlo tocando hace casi un año, y todas mis expectativas se vieron cumplidas, pude disfrutar de una noche inolvidable con un tipo que se entrega en directo y que mantiene una magnífica comunión con el público, fruto, en gran medida, de su sentido del humor y de su carisma. Confío en que le perdáis el miedo al pop, que todavía hay mucho prejuicio, y que disfrutéis de discos como éste que son perfectos para animar una buena tarde de lluvia. De regalo os dejo, como siempre unos enlaces y, como ya viene siendo habitual, un vídeo en el que Pelle Carlberg interpreta junto a Ida Maria el single de este "In A Nutshell", "I Love You Imbecile". Espero que os guste.


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PELLE CARLBERG- IN A NUTSHELL

jueves, 4 de septiembre de 2008

Jesse Sykes & The Sweet Hereafter- Reckless Burning (2002)


Hasta hace bien poco, todo lo que tuviese que ver con el profundo Oeste americano me producía un profundo rechazo. Nunca me han gustado los westerns (Lo siento Garci) ni el costumbrismo yanqui, y la imagen más sugerente que acudía a mi cerebro cuando pensaba en la música country era la del prominente escote de Dolly Parton en alguna peli compartida con el bueno de Burt Reynolds. Pero todo ese patético paisaje de tópicos, que albergaba en mi subconsciente desde mi más tierna infancia, ha ido cambiando poco a poco según he ido conociendo a algunos músicos estadounidenses como Townes Van Zandt, y sobre todo gracias al trabajo de gente como Mark Olson o Jesse Sykes, que se han empeñado en sumergirse en las raíces de la música norteamericana, actualizándola y demostrando a la comunidad musical que hay vida más allá de los clichés que tanto daño han hecho a un género tan complejo como interesante. Sí amigos, en la actualidad soy un tipo nuevo, libre de prejuicios, que disfruta con el sonido metálico de un banjo y que se estremece con la cadencia de unas melodías que me transportan a paisajes áridos, donde el tiempo se detiene y el sol impone su ley.

Como os iba diciendo, una de las responsables de tamaño cambio en mi conducta es la señorita Jesse Sykes, una mujer de aspecto ambiguo y con una cabellera digna de ganar el concurso de "Pelo Pantene". Jesse Solomon, nombre de soltera de esta cantante y compositora, tocaba con su esposo Jim Sykes en una banda llamada Hominy, con quien llegó a editar un disco en 1998, a pesar de contar con un prometedor futuro, la relación personal y conyugal se fue deteriorando hasta romperse definitivamente ese mismo año. Eran unos momentos difíciles para Jesse Sykes, que se encontraba inmersa en una depresión no sólo personal sino también creativa. Afortunadamente Jesse conoció a otro músico, el guitarrista Phil Wandscher, que también se encontraba en un período de reestructuración tras la disolución de su banda, Whiskeytown, juntos comenzaron a componer y a tocar, obteniendo como resultado un estilo verdaderamente personal y atemporal que no tardaría en suscitar la atención de la crítica. El dúo formado por Sykes y Wandscher, se vería incrementado poco más tarde con la llegada del batería Kevin Warner, el bajista Bill Herzog, y la violinista Anne Marie Ruljancich, esta última excomponente de los célebres Walkabouts; será en 2002 cuando este grupo de músicos se bautice como Jesse Sykes And The Sweet Hereafter ("The Sweet Hereafter" es también el título de una película de Atom Egoyan, de la que la banda tomaría su nombre, en España esta película se estrenó con el título de "El Dulce Porvenir" en 1997), y será también en este mismo año cuando se encierren en el estudio a grabar el que sería su primer disco: "Reckless Burning". Desde entonces la banda ha publicado tres discos y ha compartido escenarios con músicos como Neko Case, Richard Buckner, Mark Olson o The Supersuckers, entre otros.

"Reckless Burning" supone el prometedor debut de una banda con tablas más que suficientes y con un talento arrollador. Desde que escuchamos el tema que abre, y da título, al disco, somos conscientes de que nos encontramos ante algo diferente a cuanto hayamos oído hasta la fecha; la cadencia, la voz (sobrecogedora y ambigua), los arreglos, esas maravillosas guitarras... es realmente grato escuchar un disco sin que te venga a la cabeza cualquier otra referencia. Los críticos (que para todo hay...) han comparado este disco y a su simpar intérprete con una tardía Lucinda Williams y han querido ver en los nueve cortes que lo componen huellas del "Harvest Moon" de Neil Young. Yo creo que lo mejor que puede hacer uno cuando se encuentra con un disco de este calibre es, simple y llanamente, disfrutarlo. Lamentablemente hay gente que se empeña en sacar parecidos a todo, no en vano cobran por ello, y parece que disfruten restando originalidad a algunas propuestas, no seré yo quien diga que Jesse Sykes y los suyos han inventado la rueda, les contempla todo un siglo de tradición musical norteamericana, pero desde luego sí que me atrevo a afirmar que éste es un disco valiente, con unas composiciones y unas interpretaciones de una calidad sublime. "Reckless Burning" es un disco que invita a llorar y a beber, es una trampa mortal que te engancha desde la primera escucha y te sumerge en terrenos donde reina la soledad y donde la amargura se convierte en arte, una música que te transporta a moteles baratos de carretera y a atardeceres en blanco y negro. La voz de Jesse Sykes es realmente característica, he de admitir que la primera vez que la escuché no sabía si me encontraba ante un hombre o una mujer, tiene un timbre diferente que le da una apariencia varonil pero frágil al mismo tiempo; en cualquier caso es una voz que se compenetra perfectamente con las atmósferas creadas por unas guitarras que rozan el 10 olímpico (distorsiones, slide, banjo... una gozada).

El conjunto formado por los temas que componen "Reckless Burning" es sólido y coherente, no es fruto de modas pasajeras, no es un disco construído en torno a un single; es música en estado puro, emoción y técnica, Ethos y Pathos. Se hace complicado destacar un tema sobre los demás, si he de quedarme con sólo uno tal vez lo haga con "Lonely Still", ya me contaréis qué tema elegís vosotros. Después de "Reckless Burning" vería la luz "Oh, My Girl" en 2004, y por último Jesse Sykes & The Sweet Hereafter sacarían al mercado en 2007 "Like, Love, Lust & The Open Halls of the Soul", uno de los discos más aclamados de ese año por la crítica especializada. Sin más, os dejo disfrutar de esta maravilla de disco, y de regalo os dejo tres enlaces: la página web oficial de la banda, una entrevista a Jesse Sykes aparecida en Mondosonoro en 2007 con motivo del lanzamiento de su último trabajo y un enlace a un vídeo en el que podréis ver a Jesse Sykes y los suyos interpretando uno de los temazos de "Like, Love, Lust & The Open Halls of the Soul", titulado "The Air is Thin". Dejad que el aire del desierto azote vuestras cabezas y que la voz de Jesse Sykes remueva vuestras entrañas. Espero que os guste.


PÁGINA WEB OFICIAL DE JESSE SYKES & THE SWEET HEREAFTER

ENTREVISTA A JESSE SYKES EN MONDOSONORO

ENLACE AL VÍDEO DE "THE AIR IS THIN"


JESSE SYKES & THE SWEET HEREAFTER- RECKLESS BURNING